jueves, 21 de abril de 2011

Fordismo.

Fordismo. 



El término fordismo se refiere al modo de producción en cadena que llevó a la práctica Henry Ford; fabricante de automóviles de Estados Unidos.


 El fordismo como modelo de producción resulta rentable siempre que el producto pueda venderse a un precio relativamente bajo en relación a los salarios promedio, generalmente en una economía desarrollada.

El fordismo apareció en el siglo XX promoviendo la especialización, la transformación del esquema industrial y la reducción de costos. La diferencia que tiene con el taylorismo, es que ésta innovación no se logró principalmente a costa del trabajador sino a través de una estrategia de expansión del mercado. La razón es que si hay mayor volumen de unidades de un producto cualquiera (debido a la tecnología de ensamblaje) y su costo es reducido (por la razón tiempo/ejecución) habrá un excedente de lo producido que superara numéricamente la capacidad de consumo de la élite, tradicional y única consumidora de tecnologías con anterioridad.


La idea de sumar la producción en cadena a la producción de mercancías no sólo significó las transformaciones sociales y culturales que podemos resumir en la idea de cultura de masas o masas media. Como prototipo se puede hablar de la creación de automóviles en serie, de la expansión interclasista del consumo que deviene en nuevos estímulos y códigos culturales mediados por el capital.


También hay que advertir que el modelo madura bajo el esquema económico del keynesianismo (que lleva al Estado de bienestar) lo que promueve un protagonismo histórico de las clases subordinadas y el amarre del capital a consideraciones sociales y de clase. Influido todo esto por el ascenso de los socialismos reales y el miedo a su expansión global por parte del liberalismo capitalista.

En resumen, podemos contar como elementos centrales del modelo fordista:
  • Aumento de la división del trabajo.
  • Profundización del control de los tiempos productivos del obrero (vinculación tiempo/ejecución).
  • Reducción de costos y aumento de la circulación de la mercancía (expansión interclasista de mercado) e interés en el aumento del poder adquisitivo de los asalariados (clases subalternas a la élite).
  • Políticas de acuerdo entre obreros organizados (sindicato) y el capitalista.
  • Producción en serie

Henry Ford.




El sueño americano: el Ford-T





En Europa, la mayoría de las fábricas de coches habían sido constituidas entre los años 1880 y 1890 por la compañía Daimler, que en 1896 sacó a la calle el primer camión y en 1900 el primer automóvil verdadero (el moderno Mercedes), y por la Benz (ambas acabarían fusionándose para constituir la Mercedes Benz); pero en Estados Unidos, además de la factoría creada por Charles Edgar Durgea, la industria y producción de coches aún estaba sin desarrollar, circunstancia que Henry Ford supo percibir y de la que sacó provecho.

Asociado con los hermanos Dodge, fabricantes de motores, Henry Ford, con tan sólo el 25% del total de las acciones, comenzó a cosechar los primeros éxitos y también los primeros problemas con sus socios. Los hermanos Dodge se inclinaban por la fabricación de un coche de lujo y de alto precio, mientras que Ford defendía lo contrario: un coche sencillo, popular y, sobre todo, barato. La idea principal de Ford era que, si fabricaba en serie los coches, los costos de producción del automóvil se reducirían ostensiblemente, lo cual contribuiría a bajar también el precio de venta en la calle, circunstancia que haría aumentar la demanda, el mercado y las ganancias.

Tras solucionar los problemas con sus socios y optar por la compra del 58% de las acciones de los Dodge, Ford lanzó por fin, a principios de 1908, la primera serie de su flamante Ford-T a un precio único y revolucionario en el mercado, 500 dólares, bastante bajo en comparación con los 2.000 dólares que constituían el precio medio de un coche por aquella época. El éxito fue fulminante y las ventas se multiplicaron por cinco. Fue por aquel entonces cuando Ford, exultante y feliz, afirmaba: "Daré a cada americano un automóvil del color que prefiera, con tal de que sea negro". De repente, una gran cantidad de campesinos y obreros de las ciudades podían disponer de su propio vehículo, lo cual revolucionó incluso los hábitos sociales del país. El modelo Ford-T, que, según decía la propaganda, "podía hacer de todo, incluso lavar platos", se vendió solo, sin necesidad de una campaña publicitaria de grandes proporciones, como demostraron las apabullantes cifras de ventas: en 1916 se vendieron medio millón de unidades, dos millones en 1923 y, para 1927, fecha de su retirada de producción, se había alcanzado la friolera cantidad de 15 millones de Ford-T (todos ellos negros, por supuesto).

Desde el punto de vista estrictamente empresarial, el secreto de Henry Ford fue el haber sabido combinar tres factores decisivos. El primero fue la normalización y la fabricación masiva de todas la piezas que componían el vehículo, de tal forma que, al congregar ordenada y racionalmente todas las piezas sobre la cadena de montaje, se podían ensamblar, en tan sólo 1 hora y 33 minutos, un centenar largo de unidades diarias listas para salir a la calle. El segundo factor fue la concesión a sus trabajadores de unos salarios bastante altos (según sus competidores desorbitados), de cinco dólares al día, con lo que logró dos propósitos a la vez: incrementar el nivel de vida de éstos, que inmediatamente pasaban a comprarse un Ford-T, y rebajar todavía más los precios de venta. Finalmente, Ford estableció a escala nacional un tupida red de concesionarios, vendedores y expertos agentes de publicidad, y fomentó otro sistema de pago revolucionario: la compra del coche a plazos.


La Primera Línea de Montaje:


Lo que se a dicho la primera línea de montaje móvil ensayada en la manufactura y ciertamente la primera en la industria automotriz, fue producida para producir el volante de magneto del Ford T.En intento fue realizado en primavera de 1913.Bajo el modelo anterior un obrero podía terminar 35 o 40 por día de nueve horas, lo que daba un promedio de uno cada veinte minutos. Se instaló una línea a lo largo de una cadena sin fin que movía la unidades en montaje, pasando por veintinueve operaciones distintas a una velocidad de 5 pies por minuto.El primer día el grupo de obrero produjo 1.118 volantes lo que indicada un volante cada 13 minuto y 10 segundos. Los defectos de la primera línea fueron corregidos llegando a promedios de 9 minutos.




En 1919 había 6.771.000 automóviles de pasajeros en uso en los Estados Unidos, en 1929 había no menos de 23.121.000... incluso a fines de 1923 existían dos automóviles por cada tres familias en Middletown, una típica ciudad norteamericana. Los Lynd y sus investigadores entrevistaron a 123 familias de la clase obrera de Midddlteown y descubrieron que 60 de ellas tenían coche. De las 60, 26 vivían en casas maltrechas, que a los encuestadores se le ocurrió preguntar si tenían bañeras y descubrieron que 21 de las 26 no las poseían. El automóvil estaba incluso antes que la bañera!.


Algunos Datos Curiosos:


En 1908 apareció un auto nuevo: el modelo T de la fábrica Ford.Cinco años más tarde las ventas habían trepado a 248.307 autos.
Cuál fue el secreto de Henry Ford, el creador de autos más vendidos del planeta?
Ford no se limitó a diseñar y fabricar su auto, creó la manera de producir muchos autos en el menor tiempo posible, y venderlos en grandes cantidades al menor precio posible.
Ford diseño una nueva forma de organizar la producción automotriz, vinculada con la aplicación de los principios de la organización científica del trabajo. La forma característica de esta producción estaba basada en la cadena de montaje, que permitía un parcelación precisa de las tareas y una asignación rigurosa de tiempos de cada una de ellas. Estas innovaciones se tradujeron en un importante aumento en la producción. En 1909 el tiempo que llevaba terminar un Ford T era de 14 horas,y su precio oscilaba los 1500 dólares. Quince años más tardes se lo fabricaba en solo 1.33 hora y se lo vendía a 600 dólares.
Los cambios en la organización de la producción fueron acompañados por una nueva consideración de la relación entre la empresa y los trabajadores.
En salario mínimo de los trabajadores norteamericanos en aquella época era de 2.34 dólares el día, con jornadas de 9 horas diarias. En una decisión sin precedentes, Ford decidió duplicar ese salario y pagar a sus operarios la suma de cinco dólares por ocho horas de trabajo diario.

Ford, comentaba: "Es necesario que los obreros produzcan el máximo posible y reciban los más altos salarios posibles"

Pero no sólo se trataba de mantener satisfechos a los obreros, ya que era necesario una estricta subordinación de los trabajadores a la línea de montaje.
Los obreros que tenían menos de 6 meses de antigüedad o que eran menores de 21 años de edad, o las mujeres, no cobraban la doble tarifa.

Ford creía de su éxito como fabricante de automóviles dependía de la ampliación del mercado de consumidores y que para ello había que mejorar los salarios. Y estuvo en lo cierto, en 1913 existía en Estados Unidos un vehículo cada 77 habitantes. En 1920 había uno cada 11 habitantes y 10 años después uno cada 4.5 habitantes.
Ford trataba de conciliar la producción en masa con el consumo en masa, para ello se propuso fabricar automóviles cada vez más baratos y mejorar sus mecanismos de distribución y venta. Ideó hábilmente la publicidad e ideó audaces métodos de ventas. En Julio de 1941 la compañía dió a conocer una importante declaración: "Todos los compradores al menor de automóviles Ford, desde el 1 de Agosto de 1914 hasta el 1 de Agosto de 1915, compartirían las ganancias de la compañía en una extensión de 40 a 50 dólares por autos que compren, a condición de que logremos vender y entregar 300.000 nuevos coches durante ese año"

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